Como ya sabrás, el Valle de La Orotava es posiblemente una de las panorámicas más bellas que se pueden encontrar en Tenerife, dentro del cual se encuentra el Municipio de La Orotava vecino al Puerto de la Cruz a escasos minutos en coche.
Pasear por las empedradas e históricas calles de la Orotava es un placer para los sentidos y una experiencia única que te recomendamos vivir, ya que podrás sentir la esencia del pueblo del Norte de Tenerife y te podrás sentir transportado en el tiempo.
Sin embargo, hay un punto en el municipio de La Orotava que puede pasar desapercibido en ocasiones si no conoces de su existencia, también puede que te lo encuentres sin querer mientras paseas por el casco histórico, y sin duda es un lugar que merece la pena visitar y que también guarda una historia de luchas religiosas entre el cristianismo y la masonería del que ahora vamos a hablar. Se trata de los Jardines Victoria de La Orotava.
¿Dónde se encuentran los Jardines Victoria?
Los Jardines Victoria se encuentran dentro del casco histórico, junto a la Plaza de la Constitución y al Liceo Taoro. En sus inmediaciones se encuentra también una de las cafeterías más famosas de La Orotava donde podrás deleitarte con sabrosos dulces.
¿Cuándo se construyeron los Jardines Victoria y quién lo hizo?
Los Jardines Victoria fueron construidos por un arquitecto de nacionalidad francesa en el siglo XIX llamado Adolph Coquet bajo el encargo de la Familia De Ponte, con la finalidad de depositar en él un mausoleo donde irían los restos de Diego Ponte del Castillo, aunque finalmente no serían enterrado aquí sus restos. La construcción del mausoleo finalizó en el año 1884.
¿Qué se puede encontrar en los Jardines Victoria?
Los Jardines Victoria están formados por una estructura escalonada en siete pisos, donde abundan los jardines repletos de vegetación, y donde además se pueden encontrar fuentes de gran belleza. Además en lo alto de los jardines se puede disfrutar de una panorámica preciosa del casco antiguo de La Orotava, y también como punto culminante de la estructura escalonada se encuentra el mausoleo donde se pretendía enterrar a Diego Ponte del Castillo, aunque finalmente no se depositaron aquí sus restos.
El Mausoleo que se encuentra en la zona superior está construido con mármol blanco y sustentado por ocho columnas corintias, en cuya puerta se puede distinguir la letra omega.
¿Quién era Diego Ponte?
Diego Ponte del Castillo era un masón confeso perteneciente a las logias masónicas Teide y Taoro, nacido en La Orotava el 15 de abril de 1840, VIII Marqués de la Quinta Roja, miembro de una de las familias más adineradas de la isla en el siglo XIX.
Debido a su pertenencia a la masonería, el obispado y la Iglesia católica le negaban la sepultura cristiana. Ante las negativas de la Iglesia, fue la propia madre, Sebastiana del Castillo Manrique de Lara, la que encargó la construcción del mausoleo en una de las fincas propiedad de la familia. Debido a ello, se empezó a construir la estructura que se encuentra en lo alto de los Jardines Victoria. Tras la Revolución de 1868 y la Constitución de 1869, se proclamó la libertad de cultos públicos y privados y la masonería por tanto, dejó de ser perseguida. Todo ello dio lugar a la efervescencia de una gran cantidad de logias en Canarias y en España, razón por la cual, finalmente la Iglesia aprobó su sepultura cristiana a pesar de las negativas en años anteriores, y el mausoleo quedó finalmente vacío en su interior.
Diego Ponte del Castillo acabaría muriendo en 1880 con 40 años de edad.
En el mausoleo aparecen ciertos símbolos que en opinión de la mayoría de los expertos, se considera que es simbología proveniente de la masonería. Se conoce que el propio arquitecto que lo construyó también era masón, por lo cual, no es de extrañar que se encuentre simbología oculta en las instalaciones. Por el contrario, la mayoría de los expertos también coinciden en que, los jardines que rodean a la estructura, si que no cuentan con ninguna señal o guiño masónico.
Tras el fallecimiento de la Marquesa de Quinta Roja
La Marquesa de Quinta Roja, madre de Diego Ponte del Castillo, cedería las instalaciones de los jardines para realizar diversos eventos como exposiciones de horticultura, o ferias de ganados, así como posteriormente hizo también con los terrenos de la Quinta de Santa Úrsula para construir un campo de golf en él.
Cuando falleció la Marquesa de Quinta Roja, cedería estos terrenos a su buen amigo, el médico Jorge Victor Pérez Ventoso, pasando de mano en mano hasta la actualidad, siendo propiedad del Ayuntamiento de La Orotava.
Aunque con el paso del tiempo se han ido perdiendo algunas de los increíbles atractivos de estas instalaciones: como un jardín con plantas de diversos lugares del mundo, algunas de las instalaciones históricas y religiosas, y una casa neogótica que había sido construida en los propios jardines, el mausoleo se mantiene prácticamente intacto, y los jardines siguen siendo bellos, aunque perdiendo la personalidad tan característica que tenía en el pasado.
A pesar de todo, te recomendamos la visita a los Jardines Victoria que aún conservan parte de la esencia, algo de misterio oculto, una historia que merece la pena ser conocida y una vista panorámica desde lo alto, para disfrutar del casco histórico de La Orotava.